martes, 11 de noviembre de 2008

Se hace Ciencia en el país


¿Quién soy yo??– eso no importa-. Lo que importa es lo poquito que puedo mostrarles a partir de una corta experiencia vivida.


Siendo estudiante de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Los Andes, en el año 2003, decidí ir a hacer pasantías. Me acerqué a un profesor conocido y le dije: - Profesor, quiero hacer pasantías industriales- - sí, me dijo el, ¿y en donde?- - en INTEVEP, le respondí. En mi mente, INTEVEP es el corazón de PDVSA, pues allí se hace todo lo que es investigación científica para aplicarla luego en las diferentes plantas de PDVSA… Algunos se preguntaran ¿y qué es PDVSA? – Ese es otro cuento-. Lo cierto del caso es que el profesor contactó a sus amigos de INTEVEP, pero por alguna razón en lugar de INTEVEP me envió a un Instituto llamado IVIC.


IVIC (Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas), ¡Wow!, aunque ustedes quizás no tengan la menor idea de qué es, para alguien que estudia química, de procedencia humilde, además,… tener acceso al Instituto de investigaciones científicas del país con mayor prestigio es… cómo les explico… es emocionante, es saber que de una u otra forma puedes tener contacto no solo con algo desconocido, sino con una parte de los investigadores de mas renombre del país, Niños, jóvenes: es que como dice la propaganda: “Hay cosas en la vida que el dinero no puede comprar”, y para mi esta experiencia fue muy justamente eso!


Cuando subía de Caracas hacia Altos de Pipe (vía Los Teques), le decía al Señor del transporte Público: no se le olvide por favor, dejarme en la entrada del IVIC, y no se le olvidó. Cuál es mi mayor sorpresa que para poder entrar hay que presentar la cédula, el carnet de la universidad y además llamar a la persona hacia donde se dirige, porque si el, ella o ellos (los que te esperan), no están, pues no puedes entrar.


Luego, te das cuenta que eso es un mundo diferente: es una montaña, 7-8 Km, no recuerdo con precisión, pero si es una montaña donde hay comedor, residencias para los estudiantes, para los investigadores, hay un banco, una biblioteca (la mejor biblioteca de revistas científicas de Latinoamérica), servicio médico (tipo ambulatorio), modulo de la guardia nacional (porque la montaña es Parque Nacional y está protegida), y un montón de edificios que nunca llegué a visitar en su totalidad, de hecho, entré a muy pocos. Es, muy grande… al menos cuando no tienes carro y cuando no lo conoces… tiene casi de todo, hasta mercado, canchas…


¿Por qué me emociono al hablar del IVIC? Porque es una institución de excelencia, medida bajo los parámetros de publicaciones, calidad del postgrado y preparación de su personal científico. Dicho instituto ha sido centro fundamental de investigación científica del país, actuando como ente generador de conocimiento en importantes y vitales áreas para el desarrollo científico, social, económico, político y cultural de Venezuela. ¿Qué vi allí? Edificios con personal humano calificado, trabajador, pero sobretodo, científicos enamorados de lo que hacen, a pesar de que a sus investigaciones podrían sacarle un mayor provecho, pero eso también es otro cuento… ah!! Y lo mejor, es que pude tener contacto directo con parte de sus investigadores de mayor renombre: EL Doctor Gabriel Chuchani y el Doctor Carlos Rivas (de ellos hablaré más adelante), entre otros que constituyen la nueva generación aunado a la generación del relevo en un futuro no muy lejano.


Mis niños: en el país hay y se hace “Ciencia”, quizás más cerca de los que ustedes piensan… solo hay que soñarla y buscarla para poder encontrarla.